Pasamos unos días,muy lluviosos, en la cabaña de Baeturia Céltica ( así llamóse a esta zona de turdetanos con los romanos ).En un clarito fuimos a recorrer los parajes del pantano minero.Asombrados por la fuerza del agua,el silencio del campo,los estragos del temporal en la dehesa,encendimos la vela roja con la luna llena que acompañó una noche asomándose a ratosentre nubarrones y vientos borrascosos.
Descubrimos bajo un colchón de hojas de guindo los bulbos que plantamos en otoño para que reciban con sus coloretes varios a la cercana primavera.
Ali os saluta.
